jueves, 24 de julio de 2014

UNA DE GEOPOLÍTICA


Arturo A. Muñoz, su prosa campechana y su sabiduría que le viene de las raíces de su tierra... 

Las movidas imperiales, los peones planetarios, vistos desde Coltauco, el lugar geométrico de la universalidad.
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Charles de Gaulle en Chile - visita al Parlamento
Animal herido, EEUU ataca al mundo
En Washington y en Langley las cuentas del almacenero comienzan a arrojar resultados negativos. Por ello, EEUU reacciona con violencia y crueldad, reafirmando la “doctrina Monroe”
Arturo Alejandro Muñoz
El Día 24 de julio del año 1967, en una visita a Canadá, el entonces presidente de Francia, el ex general Charles De Gaulle, expresó su célebre frase: “Vive le Québec libre”, aludiendo abiertamente a que una parte del Canadá seguía siendo territorio francés… independiente del Elíseo, claro, pero francés a fin de cuentas.
Pocos meses antes, mientras se debatía en Europa occidental la posibilidad de estructurar el Mercado Común, el mismo De Gaulle había objetado el ingreso de Inglaterra a esa nueva comunidad, aduciendo que a través de Londres haría su ingreso también el tóxico capitalismo propugnado por Washington.
A ese respecto, De Gaulle expuso su argumento manifestando: “la primera potencia económica mundial es Estados Unidos de Norteamérica… y la segunda potencia mundial –si dejamos que Inglaterra ingrese a la Comunidad que hoy pretendemos crear– serían los intereses económicos de Estados Unidos en Europa”. Era sabio De Gaulle, y mientras él estuvo a cargo del gobierno francés, Washington encontró problemas para prosperar en su arremetida europea, la que había comenzado con el “plan Marshall” aplicado en la República Federal de Alemania una vez finalizada la Segunda Guerra Mundial.
En 1989 los llamados “muros ideológicos” se derrumbaron. Berlín (y Alemania) volvieron a constituir una unidad sin ambages. Los regímenes comunistas de Europa oriental cayeron aventados por las gravísimas dificultades económicas internas y la presión de sus habitantes. La balanza del poder mundial se inclinó completamente hacia lado del capitalismo. Estados Unidos y sus aliados podían sentirse vencedores luego de cuatro largas y controvertidas décadas de ‘guerra fría’.
Pero, después de 24 años dominando el mundo sin contrapeso, pareciera que en Washington y en Langley las cuentas del almacenero comienzan a arrojar resultados negativos. Además, junto a este bajón violento que asomó una de sus puntas en la pasada crisis inmobiliaria vienen sonando también trompetas de alarma para el imperio en las materias de injerencias en territorios ajenos, ya que algunas poderosas naciones (léase Rusia, China, India, Sudáfrica y Brasil) decidieron salirle al encuentro y competir –al menos en lo económico– decididos a derribar la hegemonía del dólar.
Es entonces que EEUU comienza a ponerse más peligroso aún, certificando el viejo dicho africano que los habitantes del continente negro entregaban a los bwana de los safaris: “el animal herido, es el peor de todos… se torna tremendamente agresivo… lo recomendable es matarlo”. Para nadie es un misterio que EEUU está herido… y herido de gravedad. Por ello ha salido a ocupar zonas que hasta hace una década no le significaban gastos bélicos pues mantenía negociaciones con los gobiernos locales. Pero, la cuestión cambió de tono y de color. Es que ahora sí le significan mucho; le significan la mantención del poder y la satisfacción del descontrolado consumo que su población tiene rutinariamente. Si no satisface esto último, es un hecho que más temprano que tarde comenzarían graves problemas al interior de ese país donde un alto porcentaje de su población posee armas de variados calibres y poder de fuego.
Definitivamente, a pesar de su enorme fuerza militar ofensiva, el gobierno de los EEUU está sentado sobre un barril de TNT, lo que señala cuán débil es a la hora de enfrentar disensos y acciones violentas en su propio seno. La cuantía del consumo interno tiene obnubilada a la administración Obama. Gas, energía eléctrica, petróleo, minerales varios, maderas, agua dulce… en algunos de esos elementos el gobierno de los EEUU comienza a perder su hegemonía política y económica a nivel mundial es cuando se vuelve más peligroso. Ello explica el por qué USA ha decidido “rodear” a Irán invadiendo y/o negociando con países vecinos a aquel, hasta dejar a Teherán encapsulado por adversarios de su propia estirpe. También explica por qué la Casa Blanca continúa nutriendo de armas nucleares y esperanzas a los nuevos fascistas del Medio Oriente, los sionazis de Israel… ya que por su intermedio podría capturar a Siria, que es en realidad la puerta ancha para apropiarse de todo el petróleo de esa rica zona.
Y no olvidemos a nuestro ‘barrio’ sudamericano: Washington mira con ojos de apasionado ladrón el petróleo venezolano, el gas de Bolivia, los ricos recursos de la Amazonía brasileña y el agua dulce de la zona austral de Argentina y Chile (donde se encuentra la mayor reserva mundial de ese vital líquido). En este último asunto –el del agua dulce– resulta innegable que a los EEUU le ayuda el gobierno de Tel-Aviv, quien desde hace años viene enviando –en calidad de turistas pagados por el estado israelí– centenares de ex soldados a ‘vacacionar’ en localidades de la Patagonia argentina y chilena, aunque hoy se ha comenzado a sospechar que traen como misión levantar mapas de varias zonas y entregar informes a sus jefaturas respecto de un posible poblamiento futuro… israelí, obviamente.
¿Teorías de la conspiración? El tiempo, magnífico juez, dirá su última palabra. Pero, en este caso, la cuestión es muy seria y no es asunto de sentarse a esperar, por lo cual se hace necesario que algunas de nuestras autoridades políticas despierten, sacudan la modorra y decidan investigar seriamente lo que ha venido ocurriendo en esa hermosa zona del austro de América. Mas, por desgracia, la mayoría de los chilenos desconfían de sus autoridades, de sus representantes políticos, pues sospechan que en este tema ya se han convertido en anti patriotas vendiéndose al capital extranjero permitiendo que Chile siga siendo trozado por metros y kilos.
Lo que también queda claro, y resulta innegable, es que EEUU decidió abandonar los buenos modales y las explicaciones inefables, ya que ahora, sin siquiera perder tiempo ni saliva en explicaciones, se ha quitado la careta de “amigo” y ha salido como lo hizo entre 1820 y 1950 –armas en ristre- dispuesto a conquistar a sangre y fuego aquellos recursos que su insaciable clase empresarial y su propia población impetran a diario.
En el Salón Oval y en el Congreso en Washington, sus ocupantes reafirman casi con desmesurada actitud la antigua doctrina Monroe: “América para los americanos”, ergo, para ellos, y la mirada se dirige entonces no sólo al medio Oriente sino también a la Amazonía, a los pozos venezolanos, a los bolsones de gas en las alturas andinas, a los glaciares patagónicos. La desesperación del animal herido amenaza transformarse en un ataque inmisericorde y cruel. Es lo que siempre acontece a todo imperio cuando se aproxima su final.
Al finalizar este rápido escrito, me asiste la certeza que De Gaulle, en algún lugar del éter, mueve su cabeza afirmando mis dichos y, tal vez, exclame: “¡Vive le Chili libre!”

Juan Fernando Mellado Galaz
Ex Conscripto 1973
Escuela de Telecomunicaciones
Ingeniero en Administración de Empresas
Asesor Tributario Previsional
Presidente Nacional
Presidente Agrupación Santiago
Agrupación Nacional de Ex Soldados Conscriptos
del Servicio Militar Obligatorio (SMO) período 1973-1990
Email: agrupacion.exconscriptos.chile@gmail.com

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