ME MANDARON UNA CARTA...POR EL CORREO TEMPRANO...

Hay memorias esculpidas en el mármol, con respaldo en flashPROMs y en los jodidos datacenter del planeta y su entorno inmediato, hasta Júpiter, por lo muy menos. Esta misiva, saturada de dignidad, de valentía, de solidaridad y don de gentes, nos hace ver hasta dónde ha llegado la ignominia de los "compañeros/as"...

La inmensa Violeta Parra, autora de esa otra Carta...

Me mandaron una carta… Queridos compañeros ex presos políticos en Huelga de hambre: Les hago llegar estas palabras desde el otro lado del mundo, desde Australia, un país hermoso que nos ha dado la posibilidad de desarrollarnos en muchos aspectos, pero que no ha sido capaz de mitigar los efectos de un estigma que me ha perseguido desde que salí del Estadio Nacional, de “Preso Político”. Mi vida social, aun siendo con personas afines en ideas y valores, no ha sido fácil, porque haber vivido en toda su intensidad el proceso de la Unidad Popular como dirigente estudiantil y poblacional, fue la experiencia más maravillosa y enriquecedora que me ha tocado vivir, y de esa escuela Uds. también fueron alumnos destacados, los mejores. Pero a su vez, esa incomparable enseñanza nos dejo las cicatrices más profundas que no se podrán borrar jamás, donde quiera que estemos viviendo. Fuimos el rostro visible, de mirada limpia y orgullosa por el proceso que estábamos construyendo junto a un hombre que fue leal hasta el último minuto de su vida con el pueblo que lo eligió, un político que hoy no existe en la sociedad chilena. Esa entrega entusiasta e incondicional, nos significó a partir del 11 de septiembre de 1973, la persecución, la detención, la tortura, el asesinato, la desaparición, el exilio. Nuestro único pecado era querer un Chile mejor, más justo para todos sus hijos. A partir de esa fatídica fecha, fueron agentes del Estado chileno, uniformados de un Ejército regular, los que ejecutaron las ordenes de extermino que provenían desde una civilidad enferma de odio, por los privilegios que estaban perdiendo, en una sociedad con abismantes desigualdades, que han existido toda la vida, no solo en Chile, sino en todo nuestro continente. Soñamos con cambiar ese estado de injusticias y desigualdades, estábamos acercándonos a lograrlo, pero cayó la garra de acero, y nos sometió, nos humilló, nos quiso poner de rodillas, pero eso jamás lo podrán lograr. Uds. con sus justas demandas, con esta huelga heroica, están demostrando esa valentía de un pasado que no se puede olvidar, de actos que nos dignifican, como el trabajo voluntario junto al campesino, al minero, al poblador, moviendo el país cuando la irresponsabilidad patronal quiso detenerlo. Uds. nuevamente se levantan contra la injusticia, para reclamar dignamente por lo que han reclamado toda su vida. Desde el primer día, que tuvimos que salir de la patria hace casi 41 años, nos sumamos al trabajo de la solidaridad que se agito desde todos los rincones del planeta para recuperar la democracia en Chile, donde aún falta mucho para aquello; jamás hemos estado de rodillas, porque hombres y mujeres hemos seguido agitando esas banderas que Uds. agitan hoy con su huelga, hemos seguido en la misma línea, trabajando, educándonos, tratando de ser cada día mejores. Cuiden su salud queridos compañeros en huelga, Uds. son valiosos para el futuro del país, porque aún tenemos grandes responsabilidades que cumplir, porque nuestra tarea no está terminada, debemos seguir contando lo que nos tocó vivir, aclarar a aquellos que se atribuyen el derecho, a contarnos distorsionadamente, una realidad lejana, o que no vivieron. Al comienzo de esta carta, les hablaba de un estigma, ese que existe dentro y fuera de Chile, hacia el ex preso político, que después del golpe militar no fue recibido en ningún centro laboral por esa condición, que por razones de seguridad quedo al margen del trabajo en su propio partido; que se burlaron en su cara cuando algunas vez narró parte de las torturas a que fue sometido, por lo irreales que parecían estas; o cuando hace muy poco un profesor enfermo de odio, puso en peligro la aprobación de mi carrera universitaria por ser un ex preso político. Tengo muy claro, como lo tienen Uds., que deberé cargar toda mi vida con ese estigma, y enfrentar las consecuencias por duras o tristes que sean. Pero, lo más preocupante hoy, es la falta de dialogo entre las autoridades de gobierno, donde la mayoría de ellos eran muy niños o no habían nacido durante el gobierno popular, con los representantes de Uds. en su mayoría de edad avanzada, y que están dispuestos a seguir diciendo y reclamando lo que es justo, aunque no le guste a la autoridad. Vemos con profunda alegría la solidaridad hacia Uds. que llega desde todo el mundo. Eso demuestra lo justo de vuestra causa. Desde Sydney, les hago llegar este modesto mensaje, que tiene la fuerza de un hombre que jamás sentirá vergüenza de ser un ex preso político, de ir por la vida tratando de hacer el bien, porque no nos tuvieron presos y nos torturaron por ser delincuentes, por haber robado, o siquiera intentado agredir a un compatriota, o por estar involucrados en desfalcos, en estafas, en el tráfico de influencia o algo parecido. Hago un llamado a la Presidenta de la República para que designe a las personas idóneas, para que den la respuesta adecuada a las justas demandas por las que hoy, como siempre Uds. se han levantado, para poner fin dignamente a esta heroica huelga. Omar Iturrieta León Periodista Sydney, 9 de mayo de 2015.

Juan Fernando Mellado Galaz

Ex Conscripto 1973

Escuela de Telecomunicaciones

Ingeniero en Administración de Empresas

Asesorías Tributarias Previsionales

Presidente Nacional Corporación para la
Integración de los Derechos Humanos 
del Servicio Militar Obligatorio

Email: agrupacion.exconscriptos.chile@gmail.com